sábado, 11 de octubre de 2008

Un día

El alcohol recorre mi sangre...
¡Dichosa seducción!
La felicidad brota en mí durante unos minutos, después todo acaba. Todo termina en el recuerdo.
Solo deseo que llegue el mañana. Una nueva sensación. Una nueva seducción.
Solo espero que vosotros estéis conmigo, grados de más. Solo espero que un día más pase.
Solo eso.
Nada más querido corazón.
Ya te iré contando que sucede en tu interior. Que sueños me rondan o que pensamientos se pueden hacer realidad.
Nada más querida.
Ya pondré imágenes para que alegres tu espíritu y tu vida.
Ya cambiarás con el Sol de la Luna.



mismo día, mismo sueño

No hay comentarios: